La inteligencia artificial (IA) es una tecnología que cada vez se integra más en nuestro día a día, tanto en el ámbito personal como profesional. Sin embargo, no todas las generaciones de trabajadores tienen la misma actitud hacia la IA y su uso en el trabajo.
En este post del blog de Befree vamos a hablar de un estudio reciente de Ernst & Young (EY), donde encontramos diferencias significativas entre las generaciones X, millennial y Z en cuanto a la adopción de la IA en el lugar de trabajo.
El estudio de que generación usa más la inteligencia artificial en el trabajo, se basó en una encuesta a más de 2.000 trabajadores estadounidenses de diferentes sectores y edades. Los resultados mostraron lo siguiente:
Generación X (nacidos entre 1965 y 1980)
El 70% de los encuestados de esta generación afirmó haber utilizado herramientas como ChatGPT de OpenAI en el trabajo.
Generación millennial (nacidos entre 1981 y 1996)
El 74% de los encuestados de esta generación también reportó haber utilizado la IA en el trabajo.
Estas dos generaciones, ven la IA como una herramienta que les ayuda a mejorar su rendimiento, su creatividad y su satisfacción laboral. Algunos ejemplos de herramientas de IA que usan son ChatGPT de OpenAI, que permite generar textos a partir de palabras clave, o sistemas de reconocimiento facial o de voz.
Generación Z (nacidos entre 1997 y 2005):
Es la que menos usa la IA en el trabajo, con solo un 63%. A pesar de ser nativos digitales y estar familiarizados con la tecnología, los trabajadores más jóvenes no están tan convencidos de que la IA les aporte valor. Además, pueden sentirse menos cómodos con la tecnología o más presionados por adaptarse a los cambios que implica.
Estas diferencias generacionales pueden tener implicaciones para las empresas que quieran aprovechar el potencial de la IA para mejorar sus procesos y resultados. Para ello, es importante entender las necesidades, expectativas y preferencias de cada generación de trabajadores y ofrecerles una formación adecuada, un apoyo constante y una retroalimentación positiva sobre el uso de la IA. Así se podrá fomentar una cultura de innovación y colaboración entre humanos y máquinas.