Los freelances tienen más dificultades a la hora de pedir financiación a un banco, pero, si siguen ciertas pautas, pueden lograrlo sin problemas.
La principal dificultad que tienen los freelances a la hora de adquirir una vivienda es convencer al banco para que les concedan una hipoteca, a pesar de no ingresar cada mes un sueldo fijo.
Pero desde Befree sabemos que no es imposible, y por eso os queremos revelar los errores que se deben evitar a la hora de solicitar una hipoteca y comprarse una vivienda.
No acudir al banco con la idea que nos tiene que conceder la hipoteca porque nosotros sabemos que la podemos pagar. El banco no entiende nuestro negocio ni nuestras capacidades; entiende de papeles y es con documentación que le tendremos que demostrar que generamos los ingresos necesarios para hacer frente a la cuota mensual sin problemas.
Documentación fiscal y contable, ordenada y completa. Si no somos expertos, que nos ayude nuestro asesor fiscal y contable. Tenemos que presentar beneficios y, si hay bajones en los ingresos o gastos extraordinarios, explicarlos. Cuanto más referenciada esté la cuenta de pérdidas y ganancias, más posibilidades tenemos que el director acabe mandando la hipoteca a riesgos. Hay muchas operaciones que nunca acaban siendo estudiadas, por culpa de una información deficiente.
Tener garantías y avales. Se trata de aportar documentación que demuestre la existencia de bienes en propiedad, incluyendo los activos del negocio, avalistas solventes, depósitos a plazo fijo, o cualquier otra garantía, para que el banco tenga constancia de que cobrará lo que nos concede.
Declarar menos, el gran error a evitar. Es recomendable presentar declaraciones de la renta que reflejen la realidad y sean acordes con la cuota. La información que se aporte al banco, es fundamental que cuadre con el balance del negocio.
Resolver los problemas de liquidez antes de solicitar financiación y asegurarnos de no figurar en ningún registro o listado de morosos, empezar a ahorrar cuanto antes y demostrar prudencia en el gasto, ya que a los freelances se les pide una mayor aportación que a un asalariado, serían otras cuestiones que deberemos tener en cuenta.